Continuando la inclinación de otros países, Australia abre su primer autoservicio con productos rechazados por los supermercados, sitios de comidas y por los propios usuarios. El autoservicio esta al cargo de OzHarvest, ONG construída para combatir contra el despilfarro de comestibles.
En este nuevo mercado las viejas zanahorias y comestibles envasados con fecha de caducidad próxima son tratados con respeto y dignidad. tomates maduros, que se tiran a la basura en otros establecimientos, aquí se amontonan con orgullo.
El autoservicio, situado en Sidney, va alén de avisos de propaganda para llevar a cabo en frente de los restos de comestibles y su encontronazo en el medio ámbito y para batallar el apetito. En este super todo es gratuito para esos que no tienen la posibilidad de realizar los pagos por esto.
Las existencias del almacén engloban una enorme gama de productos, introduciendo frutas y verduras frescas, panes, conservas, comidas congeladas, bebidas, elementos de precaución personal y productos de limpieza. Los aparadores son editados todos los días, en dependencia de los comestibles que se recobran. Además lo usuarios tienen la posibilidad de conceder comestibles y también canjear los comestibles que no desean por otros que tenga el mercado.
El desperdicio de comestibles en Australia cuesta cerca de $ 20 mil millones de dolares por año. Los clientes australianos gastan un veinte por ciento de sus capital en comestibles y tiran a la basura una de cada cinco cestas de la adquisición todos los años. 4 millones de toneladas de comestibles terminan en los vertederos, donde se descomponen y acaban emitiendo metano, un fuerte gas de invernadero.
La empresaria australiana tras el OzHarvest, Ronni Kahn piensa que este autoservicio es un paso en la dirección precisa. «Siempre que se ahorra en comida, asistimos al planeta. Siempre que usamos esta comida para dar de comer a personas con apetito, nos ocupamos de los inconvenientes sociales «, afirma Kahn en una entrevista.
La ONG OzHarvest trabaja con más de 2.500 donantes de comestibles. «Salvamos comestibles que no tienen la posibilidad de ser vendidos por los supermercados y los minoristas de comestibles por su fecha de caducidad, mas todavía están en estado impecable para el consumo», afirma Kahn. «Si algo ha expirado, oséa no hay razón para tirarlo a la basura.»
«Solo salvamos comestibles que son completamente comibles.» «Todos nuestros conductores están capacitados en el manejo de comestibles, y no admitirán algún producto, que mismos no logren comer.»
La mayor parte de los productos son productos que se piensan «deficientes», así como latas abolladas, o bien frutas con magulladuras y verduras algo pochas que acaban en la basura. «Todo cuanto hacemos no tiene que ver con ganancias, es con un propósito», afirma Kahn.
«La multitud va a venir y a decir, ‘Wow, o sea precisamente lo que me agradaría adquirir en cualquier sitio, y en este momento solo puedo tomarlo, emplearlo, o bien dárselo a alguien.»
Khan afirma que OzHarvest tiene sosprechado abrir otros puntos de venta, tanto en Sydney como en todo el país. «Suponemos totalmente que este será un catalizador para otros proyectos y locales. Poseemos la aptitud para realizarlo en todo el país. Este es un modelo replicable «.
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