Musgos voltaicos es un sistema de muro verde que asimismo es capaz de generar energía. Creado por la arquitecto técnico rusa Elena Mitronova, el sistema combina las ventajas ambientales que dan los muros verdes con la sencillez de poder generar electricidad limpia aprovechando su fotosíntesis.
La tecnología aplicada a esta creación se conoce como biofotovoltaica (BPV), la que aprovecha el proceso natural de la fotosíntesis para producir energía. «Cuando el musgo libera compuestos orgánicos en el suelo, nutre una serie de bacterias simbióticas. Estas bacterias absorben los compuestos que precisan para subsistir, al unísono que liberan subproductos, incluyendo electrones «, explicó el arquitecto técnico en la presentación del proyecto.
El producto es bien simple. Elena diseño unos ladrillos singulares, que crean un entorno singular para asistir a sostener el musgo vivo y en desarrollo. La parte inferior del interior del material es resistente al agua, al tiempo que el resto está hecho de arcilla porosa, sin revestimiento. Por consiguiente, la arcilla absorbe el agua, de forma que el sistema recibe el agua de lluvia y con la ayuda de un hidrogel la retiene para su empleo a lo largo de un largo periodo.
La parte más tecnológica del sistema se debe a un conjunto de dieciseis módulos. Conforme su diseñadora una pared con 2 metros cuadrados genera lo bastante para nutrir una lámpara led. Con cuatros metros cuadrados ya podríamos cargar un móvil, y con unos 8 metros cuadrados un computador portátil.
Musgos voltaicos fue desarrollado para ser una testera independiente. Su diseño deja que el musgo se halle en la situación ideal para su desarrollo natural, sin la necesidad de un mantenimiento diario o bien incesante.